Hotel en madrid: uno para no recomendar

Pues sí, también tengo experiencias no tan positivas cuando elijo un hotel. Normalmente busco y rebusco hasta  encontrar el hotel que mejor se adapte a lo que necesito en cada viaje. La última vez que estuve en Madrid, reconozco que no estuve acertado en la elección del hotel.

Me cogí un vueling, no demasiado barato, porque no lo pude comprar con tiempo, pero llegué a tiempo y sin incidentes. Para el alojamiento, y por precio, elegí el Hotel Francisco I, en la calle arenal. Pleno (centro, en el mimísmo centro de Madrid. ¡Demasiado centro! Os cuento...

El hotel Farncisco I es uno de tantos hoteles antiguos que está a medio remodelar.  Y a mi me toco la parte sin remodelar. Previsible por el precio... A parte de eso, el ruido de la calle no me dejó dormir en toda la noche. Ventanas cerradas al máximo (al máximo que podían cerrar, claro) y el escándalo de la calle se colaba por ellas como si estuvieran abiertas. Para colmo los vecinos de la habitación de al lado, no dejaron de dar voces en toda la noche, y no por lo que algunos de  vosotros estáis pensando... Sigo pensando que era ella quien le atizaba a él... a punto estuvimos de acabar con la policía por en medio.

A parte del ruido de los vecinos, me sucedió algo con el hotel con lo que nunca me había encontrado. La habitación era doble, pero estaba yo solo. Había quedado con un amigo de Madrid, y después de patear la ciudad necesitaba ir al baño. Pues que no le dejaban subir un momento a la habitación. Ni dejando los datos personales o el DNI, que no. Finalmente el recepcionista le dejó subir un momento, pero casi por caridad, vamos.  Además, el servicio hacía ruido durante todo el día, incluso el mediodía, la tarde, ¡siempre!

El desayuno, incluído en el precio justo justísimo. Aunque bueno, eso es cuestión de gustos. Pero vamos que la experiencia global no fue nada satisfactoria, teniendo en cuenta que eran 40 euros por noche.

Finalmente, y antes de marcharme, le pregunté al recepcionista sobre que hora me recomendaba levantarme para irme al aeropuerto desde el hotel (calle Arenal, casi en la Puerta del Sol) y me trató de estúpido (casi se ríe de mi en la cara) diciéndome que para ir desde Puerta del Sol al aeropuerto en metro, necesitaaría ¡más de una hora y media! Le intento contar que el metro abre a las 6 de la mañana y que en cosa de 40 minutos te plantas allí y en lugar de aceptar mi opinión o simplemente callarse, me suelta que si estoy loco que de eso nada, que lo sabrá él... vamos que no me lié a discutir porque hay con quien es mejor no gastar ni un gramo de energía.

Francamente, porque estuve más tiempo fuera del hotel que dentro, pero prefiero pagar un poco más, para no tener que aguantar segun que atención al cliente y deficiencias en las instalaciones. En este caso, lo barato  salió caro. Muy caro para mi gusto.